El GPP propone un plan de apoyo psicológico para los sanitarios y familiares de afectados por el coronavirus

Mediante proposiciones no de ley

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• Recuerda que la Sociedad Española de Psiquiatría recomienda a las personas que llevan 15 días encontrándose tristes, con ansiedad y preocupación, ponerse en contacto con los centros de salud para recibir una valoración cualificada

El Grupo Parlamentario Popular ha presentado, mediante dos proposiciones no de ley, un plan de atención psicológica para los profesionales sanitarios con el que paliar el desgaste emocional derivado de su actividad durante la crisis generada por el coronavirus, y otro para los familiares y allegados de fallecidos por la pandemia.

Como recuerda el GPP en su iniciativa, firmada por su portavoz, Cayetana Álvarez de Toledo, la vicesecretaria social del PP, Cuca Gamarra, su portavoz adjunto, José Ignacio Echániz, y su portavoz de Sanidad, Elvira Velasco, la Sociedad Española de Psiquiatría ha valorado en las últimas semanas que encontrarse triste, con ansiedad y preocupación entra dentro de lo esperable en la coyuntura que vive España, y recomienda a las personas que experimenten estos sentimientos durante más de quince días que se pongan en contacto con los centros de salud para recibir una valoración cualificada y precisar si su situación precisa una atención especializada.

Para el Grupo Popular, el ejemplo más representativo del desgaste psicológico que está provocando el coronavirus son los profesionales sanitarios, debido, entre otras
cosas, a las jornadas laborales extensas en horario e intensas desde el prisma de la carga emocional y en la carencia permanente de material de protección adecuado con el que afrontar su día a día en los centros asistenciales.

Asimismo, como ha señalado el GPP, los familiares de los fallecidos por coronavirus, con casi total seguridad, no pudieron acompañar a estos en sus últimos momentos. Esta circunstancia, sumada a los sentimientos que suelen aflorar habitualmente cuando se produce la pérdida de un ser querido, incrementa la complejidad emocional de la situación y pone sobre la mesa la necesidad de ofrecer a las familias de los fallecidos la posibilidad de recibir un apoyo adicionalpara afrontar el duelo con la mayor entereza posible.