"Que un español visite Melilla nunca puede ser considerado una deslealtad"

El vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Esteban González Pons, ha asegurado que la visita del ex presidente del Gobierno José María Aznar a Melilla nunca puede ser considerada por parte del Gobierno como una deslealtad

El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons
El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons

A juicio de González Pons, se puede traslucir que para algunos "quizás Melilla no forma parte de España".

"Aznar es un español que visita Melilla, que es España. Y que un español visite España nunca puede ser considerado una deslealtad por el Gobierno. Cuando el Gobierno dice que es desleal que un español visite España es que ese Gobierno se avergüenza, tapa e intenta ocultar una parte de España", ha señalado.

Durante una entrevista en el programa Protagonistas de Punto Radio, Pons ha señalado que la tensión creada por el Gobierno tras la visita de Aznar a Melilla "no es lógica, no tiene sentido y es muy poco solidaria con los españoles que viven en Melilla. Para los españoles visitar Melilla -que es España- es tan natural como visitar Almería, Cádiz o Valencia".

Asimismo, el vicesecretario de Comunicación del PP ha acusado al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, de reunirse primero con su homólogo marroquí antes de hacerlo "con lo suyos", con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Bandazos en Economía
Por otro lado, González Pons se ha preguntado cuál será el siguiente bandazo que dará el Gobierno en materia económica, "que va a la deriva y se deja conducir por los distintos vientos".

Por último, González Pons se ha referido al comunicado de Batasuna conocido ayer en el que no condena los actos de kale borroka, para asegurar que lo que tiene que hacer el brazo político de ETA es "disolverse y abandonar completamente los posicionamientos políticos de justificación de la violencia".

"No podemos entrar en el juego de leer las acciones políticas de Batasuna como las escriben ellos para ser leídos por sus ojos. Porque los ojos de un demócrata nunca leen igual que los de alguien que alguna vez practicó, ayudó o justificó el terrorismo", ha concluido.