El PP critica un recorte de un 37% en los servicios sociales básicos

Gonzalo Robles califica de paradójico que el Gobierno diga que "hay que mantener el esfuerzo y la tensión a favor de la ayuda al desarrollo" cuando la ha recortado en más de un 20% desde 2009

El portavoz de cooperación internacional del Grupo Parlamentario Popular, Gonzalo Robles, ha criticado el drástico recorte en Servicios Sociales Básicos que recoge el Plan Anual de Cooperación Internacional para 2011.

Robles se ha preocupado por este descenso de más de un 37% sobre lo destinado a estos fines en 2010. Y es que, dentro de estos recortes, hay partidas tan importantes como salud, educación, agua y saneamiento.

Con estos recortes, el Gobierno está incumpliendo su compromiso con estos sectores fundamentales en la cooperación internacional para el desarrollo que, además, forman parte de los Objetivos de Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas. De hecho, tanto el Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento como el Fondo Global para la lucha contra el SIDA, la tuberculosis y la malaria son dos de los grandes perjudicados por estos recortes

Por otro lado, el portavoz popular también ha criticado que el PACI 2011 no contenga una propuesta económica creíble para alcanzar los objetivos fijados por Naciones Unidas para 2015.

Y es que, según Robles, resulta paradójico que el Gobierno siga afirmando su "compromiso" y que diga que "hay que mantener el esfuerzo y la tensión a favor de la ayuda al desarrollo" cuando, por otro lado, la haya recortado en más de un 20% desde 2009. Recortes que, además, se han hecho sin una reflexión y sin un debate con los demás grupos políticos en la comisión de cooperación del Congreso de los Diputados.

Finalmente, ha reprochado la pérdida de liderazgo de España dentro del sistema de Naciones Unidas, donde somos uno de los mayores contribuyentes. Esta pérdida de liderazgo se demuestra en que, aún habiendo aumentado nuestras aportaciones a muchos de las Agencias de Naciones Unidas, el número de altos cargos españoles se ha visto reducido; así, el ejemplo más claro ha sido el caso del único director español que había, Inés Alberdi al frente de UNIFEM, que ha dejado su puesto en manos de Michele Bachelet después de que España haya aportado a este organismo más de 225 millones de euros.