La pionera Ley de Transparencia será el primer paso para iniciar la regeneración democrática

La Ley de Transparencia tiene el objetivo de que todos los ciudadanos conozcan cómo las administraciones gestionan el dinero público

Ahora España carece de una norma específica que asegure la transparencia del Gobierno y las instituciones y que les obligue a rendir cuentas a los ciudadanos.

Será una de las primeras y más importantes medidas del Gobierno para cumplir con su compromiso de investidura de un plan de regeneración democrática para dotar de confianza y credibilidad a las administraciones.

Tiene el triple objetivo de incrementar la transparencia en la actividad pública, reconocer y garantizar el acceso a la información y establecer las obligaciones de Buen Gobierno que deben cumplir los responsables públicos.

Puntos clave de la futura Ley de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Buen Gobierno: 
- Todas las Administraciones Públicas tendrán la obligación de publicar toda la información relativa a la gestión del dinero público.
- Se aprobará por primera vez con rango de ley un Código de Buen Gobierno destinado a todas las administraciones.
- Se refuerzan las sanciones contra el despilfarro y la mala gestión de los recursos y se fijará un baremo público sobre las retribuciones de cargos públicos.
- Por primera vez, la elaboración de una ley se ha abierto a la participación ciudadana directa a través del Portal Digital de la Ley de Transparencia.
- España se situará entre los países occidentales con mayor nivel de transparencia.

El mayor control sobre la actividad pública, la mayor información accesible y la participación favorece también el crecimiento económico por tres vías:
1. Los políticos toman mejores decisiones, porque disponen de mayor información para formular las políticas y están sometidos a mayor supervisión.
2. Se mejora la competitividad económica, porque se asignan mejor los recursos, y se toman mejores decisiones de consumo, inversión y organización.
3. Impulsa la atracción de inversión directa extranjera, porque las decisiones de inversión dependen de factores como el conocimiento de las reglas y normas.