"No es un capricho sino el resultado de un desastre heredado que debe resolverse"

Antonio asegura que sin una energía segura, abundante y competitiva no puede tener éxito ninguna otra política

El portavoz de Energía del GPP recuerda que la pobreza energética no es un concepto energético sino un problema vinculado a la calidad de vida.

El portavoz de Energía del Grupo Popular, Antonio Erias, afirmó hoy que sin la existencia de una energía "segura, abundante y competitiva" no existe ni calidad de vida ni pueden tener éxito el resto de las políticas y avaló la política energética del Ejecutivo ante el "desastre heredado" con el que se ha topado el Gobierno del PP.

En el debate de enmiendas del Proyecto de Ley del Sector Eléctrico en el Pleno del Congreso, el diputado popular señaló que la política energética que está desarrollando el Gobierno se está aplicando en otras partes del mundo, tal y como recoge el Informe 2013 de la energía en el mundo, y que esa política "no es un capricho ni una arbitrariedad sino el resultado de un desastre heredado" que hay que resolver.

A su juicio, la pobreza energética "no es un concepto energético sino que tiene que ver con la calidad de vida". "La calidad de vida depende de la renta disponible y esta de la renta disponible, pero para que haya renta debe haber empleo y para que haya empleo debe haber actividad económica y para que haya actividad económica debe disponerse de una energía que sea competitiva, abundante y segura, porque sin esto no existe nada", apostilló.

Erias agradeció el trabajo aportado por todos los grupos, especialmente en el caso de PNV y CiU, en una ley que ha concitado un "amplio respaldo", al tiempo que censuró a aquellos que "reclaman rigor cuando desarrollan la mistificación más elevada que pueda uno imaginar en cualquier foro".

"Reclaman al mismo tiempo ortodoxia y se olvidan de toda la heterodoxia que nos ha conducido a que en estos momentos haya que poner orden dentro de un edificio que no disponía, ni siquiera, de cimientos", prosiguió Erias, repasando algunos datos que hablan de manera muy gráfica del "desastre heredado", no sólo los 5 millones de parados, el 10% déficit público o el desajuste estructural en todos los sectores productivos, sino también la subida de la luz en un 67% entre 2005 y 2012 y los 27.530 millones de déficit tarifario como resultado de políticas desastrosas.

Erias también puso sobre la mesa la paradoja de quienes desde determinado planteamiento político nos han abocado a un escenario energético en el que, precisó, "el problema no es de demanda sino de oferta". "Como el viento no ha soplado, como la hidráulica no ha tenido tanta presencia y de 25.000 megavatios en ciclos combinados se han utilizado 2.500 nos hemos topado con esta paradójica situación", explicó Erias, advirtiendo de que "si hiciéramos con la oferta lo que dicen quienes proponen que las centrales nucleares no existan y se satisfaga con las renovables, en estos momentos no estaríamos a 102 sino a 400".

Como resaltó Erias para finalizar, la energía es clave "en el desarrollo y la mejora del bienestar de los ciudadanos así como para promover la competitividad y que nuestras empresas desarrollen los procesos productivos con eficiencia y eficacia", por lo que reprochó a aquellos que acuden al Parlamento "a decir lo primero que se les ocurre sobre la base de lo que creen que les es conveniente", como aquellos que hablan de pobreza energética olvidando que la Directiva 79 de 2009 ya preveía esto, y lo preveía en tiempos del Gobierno de Zapatero.