Las Cajas deberán dirigir sus funciones a los que tienen más difícil acceso a la financiación

Fernández de Moya: "Se pone encima de la mesa un importante ejercicio de profesionalización de los órganos de gobierno de las cajas de ahorros"

José Enrique Fernández Moya
José Enrique Fernández Moya

Fernández de Moya ha defendido hoy, en la sesión plenaria del Senado, el Proyecto de Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias que ha sido aprobado con los votos a favor del PP y el PNV y la abstención de PSOE y CiU.

 

El senador del PP por Jaén y portavoz de Economía del GPP el Senado, José Enrique Fernández de Moya, ha afirmado que la Ley de Cajas propone “una vuelta al modelo tradicional de cajas, al realizarse una vinculación explícita de su actividad financiera con las necesidades de los clientes minoristas y de las pequeñas y medianas empresas, de manera que este tipo de entidades financieras focalicen sus funciones en aquellas capas de la sociedad que tienen más difícil acceso a otro tipo de entidades financieras o crediticias”.

El senador Popular por Jaén  ha afirmado que esta ley es “necesaria para la modernización del sistema financiero y para profundizar en el presente y el futuro de las cajas de ahorros y las fundaciones bancarias”.

Al mismo tiempo, ha reseñado que “pone de manifiesto el respeto a la distribución competencial entre Estado y Comunidades Autónomas”, y que tiene “pleno encaje en la normativa constitucional”, ya que respeta la jurisprudencia del Tribunal Constitucional. 

En este sentido, Fernández de Moya ha insistido que, en la actualidad, la estructura jurídica de las cajas "no permite hacer frente" a situaciones de crisis.

 

ASPECTOS NOVEDOSOS DEL TEXTO

Como aspectos novedosos del nuevo texto legislativo, el portavoz popular ha destacado que “se ha previsto una restricción al tamaño de las cajas, para evitar que alcancen un carácter sistémico”. En este sentido, Fernández de Moya ha resalta que “es preciso evitar que las cajas tengan un tamaño excesivo y, en consecuencia, puedan poner en peligro el sistema financiero”. 
 

Además, ha precisado, que se ha buscado no solo el tamaño adecuado que deben tener esas cajas de ahorros, sino que también que operen de manera clara en un ámbito territorial determinado; y que la función social de cada una quede vinculada al territorio sobre el que opere.

Fernández de Moya ha indicado que “el marco fundamental de actuación de las Cajas de Ahorros, conforme al texto normativo objeto de debate, debe ser fundamentalmente el de la Comunidad Autónoma donde se implante, sin que puedan desarrollar funciones en el ámbito nacional”.

Ha subrayado también que “se pone encima de la mesa un importante ejercicio de profesionalización de los órganos de gobierno de las Cajas de Ahorros, aspectos cuya necesidad ha sido puesta de relieve tanto a nivel internacional como nacional”. 

En particular, -ha explicado- a partir de ahora será necesario que todos los miembros del Consejo de Administración de la propia entidad financiera de la Caja de Ahorros, y no solo la mayoría –como se exigía anteriormente-, cuenten con conocimientos y, al mismo tiempo, experiencia específica para el ejercicio de sus funciones.

Igualmente, el senador del PP por Jaén ha afirmado que se reduce el porcentaje de participación de las administraciones públicas, y se refuerza el papel de los impositores, mediante la previsión de un nuevo mecanismo para la designación de sus representantes en el ámbito de la asamblea general, incrementando su presencia en la misma hasta la horquilla entre el 50% y el 65%.

Para Fernández de Moya este conjunto de medidas “pretende que aquellas personas que tengan depositados sus ahorros en las Cajas puedan ver mejor representados y defendidos sus intereses en los órganos de gobierno competentes de las cajas de ahorros”. 

Otro aspecto singular, en su opinión, son las normas sobre incompatibilidad en el ejercicio de las funciones de gobierno de las cajas, “la necesidad de que en estos órganos y en los comités de las Cajas de Ahorros exista un porcentaje de consejeros independientes”. 

 

FUNDACIONES BANCARIAS

Por lo que concierne a las fundaciones bancarias, el portavoz de Economía considera que es importante que “sean objeto de una regulación similar a la que el propio Estado ha dictado en relación con las entidades crediticias. “De hecho, solo así podemos garantizar la estabilidad del conjunto del sistema financiero”, ha recalcado.

En la misma línea, ha relatado que esta Ley pone de manifiesto que debe regularse igualmente el régimen de transformación en una fundación bancaria, tanto de las Cajas de Ahorros como de las propias fundaciones ordinarias. 

Respecto a las Cajas de Ahorros, su transformación en fundación bancaria y, en consecuencia, su cambio de naturaleza financiera y jurídica. Ha detallado que se producirá en los dos supuestos siguientes: el primero, cuando una Caja de Ahorros crezca por encima de los límites permitidos por la ley, y el segundo, que a la entrada en vigor de la Ley estén ejerciendo su actividad financiera a través de un banco.

Para finalizar, ha asegurado establece el régimen de profesionalidad e incompatibilidad de los miembros que integran los órganos de Gobierno, así como también las cuestiones de supervisión de su actividad financiera.