• El presidente del PP asegura que la inmensa mayoría de españoles estamos unidos en base a unos principios forjados durante 45 años de democracia que no se pueden conculcar: “No vamos a volver a una minoría que se imponga a la mayoría que quiere concordia, libertad, unidad de nuestro país, fraternidad entre españoles y respeto entre sus lenguas y culturas”
• “No quiero que nuestro partido sea ni de unos ni de otros. Pretendo que esté entre unos y otros. Me presento para ser presidente de todos los españoles sin bloques ni bloqueos”, dice seguro de que, “por encima de medirnos los unos contra los otros, podemos encontrarnos”
• Advierte de que el programa oculto de Sánchez son las exigencias públicas del independentismo: “Ni los independentistas van a cesar en sus exigencias ni Sánchez en sus concesiones. Hay que evitarlas en las urnas”
• “Seré un presidente en el que los españoles puedan confiar y seré un presidente que una a los españoles. Lo hare y será de la única manera posible: decirles la verdad”, admite mientras agrega que los ciudadanos pueden esperar de él autenticidad
• “Veo posible conseguir una mayoría suficiente y lo pido expresamente porque creo que le sentaría muy bien a España, para gobernar en solitario. Necesitamos esa mayoría para levantar España y reconstruir su unidad económica, social e institucional”, asevera
• “Sobre todo, no quiero ganar por ganar. Quiero contribuir a que mi país pueda cambiar a mejor”, recalca manifestando que “no tengo ningún ánimo de revancha, solo el interés por servir”
• Señala que, si llega a ser presidente, se pondrá solo a disposición de todos los españoles. “Soy Alberto Núñez Feijóo, servidor público con más de tres décadas trabajando en las administraciones públicas, y quiero ser presidente del Gobierno de España”, reconoce
• “España está mucho más de acuerdo que lo que refleja la política de bloques a la que nos ha llevado el sanchismo, está mucho más hermanada de lo que pretenden las minorías y en España hay mucho más entendimiento que el enfrentamiento que se observa en el Congreso de los Diputados o en el Senado”, subraya
• Incide en la importancia de que el país recupere el respeto y apunta que la opinión de la mayoría democrática no puede ser sometida por la de minorías como Bildu, que pretende imponer su “visión egocéntrica” de lo que es España
• Defiende que es el momento de que el país aspire a mucho más que presumir de estar a la cola en empleo y recuperación, de que las rentas más bajas paguen menos por el IRPF –medida que hará efectiva en sus primeros 100 días de Gobierno–, de que la sedición vuelva a ser delito y de que en el Ejecutivo central haya personas competentes, que nunca redactarían una Ley como la del solo sí es sí
• “Cumpliré mi palaba dada. Como presidente, no trabajaré para ningún partido, trabajaré para nuestra nación”, afirma
• “Si los españoles me conocen bien, se van a sentir satisfechos, tranquilos y optimistas de votarme el 23 de julio”, expresa al tiempo que resalta que el PP derogará el sanchismo: “Se lo debemos a los españoles y a los socialistas”
• Indica que el cambio que el país necesita cobrará sentido si la mayoría municipal y la mayoría autonómica “se convierte, sumada, en el remate el adiós al sanchismo y el hola a la España de todos"