Feijóo anuncia una Ley de Mecenazgo para captar inversión que potencie la política cultural, basada en la libertad de creación y el talento

En un acto sectorial de Cultura en Madrid

Alberto Núñez Feijóo en un acto sectorial de Cultura en Madrid.
Alberto Núñez Feijóo en un acto sectorial de Cultura en Madrid.

El presidente del PP asegura que el titular del Ministerio de Cultura tendrá una visión de Estado para afrontar retos como la precariedad del sector y la coordinación entre administraciones

• “Dirigirá un Ministerio de verdad, con políticas útiles, de presente y futuro, que se dedicará a potenciar la creatividad de nuestros autores”, subraya, frente al de la actual legislatura caracterizado por el nombramiento de cuatro ministros, sin proyectos, estabilidad, ni continuidad”. “En mi gobierno la cultura tendrá un rango ministerial, como ha estado presente en todos los gobiernos que he presidido”

• Afirma que apostar por la Cultura es hacerlo por la innovación, la industria, el arte, el turismo cultural, el reconocimiento internacional de España, la educación y el aprendizaje. “Apostar por la cultura es apostar por un país mejor, para todos y entre todo”, asegura

• Promoverá una estrategia para la proyección exterior de España a través de la cultura aprovechando la herramienta de un idioma que llega a casi 600 millones de habitantes y la potencia del Instituto Cervantes, “que será el mayor polo cultural del mundo con sus 89 sedes en los cinco continentes”

• Subraya que el Ministerio servirá solo a la cultura del país “y no será una herramienta para solucionar los problemas del presidente o una cartera vacía de contenido que sirva como cargo de consolación o arreglo de equilibrios territoriales del Partido”, explica

• Traslada su firme compromiso de mano tendida al sector para mantener un contacto permanente, escuchar sus demandas, potenciar su actividad y darle estabilidad laboral, además de “potenciar los mecanismos de diálogo y coordinación entre administraciones y la creatividad de nuestros autores”

• Remarca que la Cultura es “legado, historia y futuro; es entendimiento del mundo que nos rodea, afirmación de la extensión y la diversidad de nuestro país y debe ser, ante todo, libertad para expresarse, para molestar al poder, equivocarse e innovar”

• Pide unidad en torno a un proyecto comprometido con la reconstrucción económica, social e institucional, que nos una en torno a los valores que siempre hemos defendido, “que no tiene etiquetas, no va contra nadie, no señala, divide, excluye y no reparte carnés de nada”

• “En tiempos en los que la palabra de algunos políticos no vale nada, yo reivindico la política de palabra, hechos y compromisos, sin compromisos con nadie y con la única exigencia de servir y dar cuentas a nuestro país. Ese es el proyecto que quiero liderar y lo que ofrecemos este 23 de julio”, concluye

• Muestra su compromiso, respeto y encuentro entre “el partido que lidero, las políticas culturales que entendemos necesarias para nuestro país, y los ciudadanos, que deben saber qué proyecto político van a escoger en las urnas el próximo 23 de julio”

• Denuncia que el Gobierno de Sánchez se haya empeñado en decirle a todo el mundo lo que tiene que hacer, cómo tiene que pensar y lo que se puede o no expresar, y defiende el ejercicio de una cultura libre y crítica con el poder. “Estoy convencido de que gracias a la Cultura mejoramos como país y nos acercamos entre nosotros”

• Agradece su presencia en el acto a César Antonio Molina, ex ministro socialista. “Me siento muy orgulloso de que un socialista convencido pueda estar hoy aquí y haya dicho lo que ha querido. Aquí no se ha pedido carné para entrar ni ideología para sentarse ni censura para hablar”

CÉSAR ANTONIO MOLINA

• El ex ministro socialista de Cultura, César Antonio Molina, define al presidente Feijóo: “Es un hombre sensato, capaz, leal, paciente, claro y fiable”. “Una persona en la que ustedes pueden confiar”, subraya

• Señala que Feijóo, un “presidente de primera”, no lo ha tenido fácil en Galicia “una autonomía de primera, como todas en España”; y lo contrasta con Sánchez, para quien “solo son de primera vascos y catalanes”. “Me siento orgulloso de él y me siento representado por él”, concluye