Vedrina critica que el Gobierno “no ha movido ni un dedo” para mantener los centros de examen de conducir desplazados y le exige cumplir el mandato de la Cámara

25 NOV, 2025

En el Pleno de Congreso

La diputada del GPP, Elisa Vedrina, critica que la Dirección General de Tráfico imponga, a partir de 2026, la digitalización de las pruebas teóricas y una serie de requisitos técnicos muy específicos a los ayuntamientos para mantener la condición de centros examinadores, unas exigencias “difíciles de
asumir para muchos municipios pequeños”

Reprocha que todo esto se haga “sin una sola línea de financiación, sin apoyo técnico y sin mecanismos de acompañamiento”

Asegura que “España no necesita un Gobierno ensimismado y cercado por la corrupción, sino uno capaz de afrontar la fragilidad de los servicios públicos, necesita uno comprometido con el equilibrio territorial y con la defensa del bienestar de todos los españoles, vivan donde vivan”

Pide a la DGT que “asuma el coste de la digitalización que exige y que financie las adaptaciones necesarias para mantener los centros operativos para que ningún municipio pierda este servicio”. “Pedimos que la digitalización no se convierta en una frontera entre quienes pueden adaptarse
y quienes no”, subraya

Defiende que el modelo de los centros de examen desplazados, donde los ayuntamientos ceden las aulas y la DGT desplaza a los examinadores, “nacieron para acercar las pruebas del permiso de conducir a quienes viven lejos de las capitales”

Denuncia que tenemos “un Gobierno instalado en un encierro narcisista incapacitado para comprender las dificultades que condicionan la vida de millones de familias”

Asegura que “España no necesita un Gobierno ensimismado y cercado por la corrupción sino uno capaz de afrontar la fragilidad de los servicios públicos”, necesita uno comprometido con el equilibrio territorial y con la defensa del bienestar de todos los españoles, vivan donde vivan”, apunta

Sostiene que “la digitalización es necesaria pero que esta no puede convertirse en un obstáculo ni en una exigencia que acabe recayendo sobre ayuntamientos que sostienen, con presupuestos modestos y muy ajustados, un acceso razonable al permiso de conducir”