El Senado aprueba una moción del Grupo Parlamentario Popular –con
el voto en contra del PSOE- que exige al Gobierno “que deje de
estorbar” en el proyecto del vial de acceso al puerto de El Musel, en
Gijón.
En concreto, la propuesta de los populares solicita la firma de un
convenio entre el Principado de Asturias, el ayuntamiento de Gijón y el
Ministerio de Transportes para el diseño y ejecución del acceso al
puerto de El Musel.
La iniciativa también pide al Gobierno que precise cuanto antes los
plazos y el presupuesto de las obras de acceso a El Musel, incluyéndolo
en los PGE para el año 2025, o en su defecto, manteniendo y ampliando
la proyección presupuestaria contenida para esa actuación en los PGE
del año 2023.
El senador Pablo González pide una solución a un problema que lleva
pendiente casi 40 años, que se inició con el ministro socialista Barrionuevo al frente y, posteriormente, con otros 10 ministros; a la vez
que pide al Gobierno que “deje de tomar el pelo” a los asturianos.
“Después de 38 años, el PSOE está invalidado para plantear ninguna
solución creíble al vial del puerto”, reprocha Pablo González a la
bancada socialista, a la vez que apunta que “quienes crearon los
problemas no pueden ser parte de la solución”
Urge a poner fin a esta situación, ya que por el casco urbano de Gijón
cada día pasan más de 1.000 camiones que transportan mercancías
contaminantes y peligrosas como son carbón o gas, entre otras, y que
afectan a más de 25.000 personas, que “llevan años soportando una
presión en su salud y un peligro real en sus vidas mucho más allá de lo
razonable”.
EL PP RECLAMA EL FIN DE UN ESPERPENTO QUE HA ROTO GIJÓN
En este punto, González recuerda la cronología de este problema que
comienza en el año 1986 hasta hoy, que el propio Principado de
Asturias “plantea un proyecto distinto al del Ministerio, que se parece
sospechosamente al que había impulsado el Ministro Iñigo de la Serna
y que resultó abandonado” por el gobierno del PSOE”.
En este sentido, el senador recuerda que ya en 2005 las tres
administraciones -todas ellas gobernadas por los socialistas- firmaron
un protocolo que repartía las obligaciones de ejecución de la obra entre
las mismas. En esta ocasión, el PP propone un convenio para asegurar
la financiación.
“Para colmo de este esperpento, este jueves, casualmente, hay una
reunión en el Ministerio para decidir qué proyecto hace ¿Pero qué
tomadura de pelo es ésta? Ya no nos creemos nada. El Ministerio
alargó una chapuza en el tiempo para justificar el no hacerlo”, critica el
dirigente asturiano.
Por todo ello, el senador afea al PSOE que rechace la iniciativa de su
Grupo que pide que se pongan fin a “obras a medio terminar que han
dejado la ciudad urbanísticamente rota”.
“Si para el Gobierno la Generalitat Catalana tiene todo el derecho a
decidir cómo se gasta el dinero en su comunidad. Los asturianos no
somos menos. Nosotros no queremos romper la caja común, ni
negociar algo de manera bilateral, ni ser insolidarios con el resto de los
españoles. No queremos una especie de cupo inversor”, concluye
Pablo González.