En sendas entrevistas en RNE y Es Radio
- El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Miguel Tellado, se muestra convencido en que este domingo “va a haber un grito unánime, desde la Plaza de España de Madrid, de una sociedad que está cansada de la corrupción económica, política y moral que envuelve a este Gobierno”
- Asegura que lo que busca el presidente del Gobierno en la Conferencia de Presidentes es “una foto de normalidad cuando su gobierno vive una situación de auténtica anormalidad democrática”
- “El PP ha querido llevar a la Conferencia de Presidentes temas que preocupan a la ciudadanía como la educación, sanidad, financiación autonómica, plan para evitar un nuevo apagón, etc…”, explica, al tiempo que insiste en que “Sánchez va a rastras, buscando una foto de normalidad y luego salir rápido”, y, por eso, no contestará a las preguntas de los periodistas y lo hará el ministro Ángel Víctor Torres
- Recuerda que Sánchez lleva 37 días que no contesta a preguntas de los periodistas. “Tenemos un presidente del Ejecutivo que huye con trampas para no dar cuenta en el Congreso de los Diputados sobre el caso de Leire Díez”, añade
- Denuncia que “hay una estrategia de proteger al presidente frente al caso de Leire Diez” y que prueba de ello es que la petición de comparecencia del PP para que Pedro Sánchez dé explicaciones “ha sido bloqueada por la presidenta del Congreso, Francina Armengol, con la colaboración de Sumar”
- “Tenemos un Gobierno a la huida, forajido y España no merece esto y, por eso, convocamos la manifestación del domingo”, sostiene al tiempo que sentencia que “es la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo y no el Partido Popular quien ha acusado al ex numero dos de Sánchez, José Luis Ábalos, de pertenencia a organización criminal. Eso es mafia”
- Expone que Sánchez, aunque “está noqueado”, tratará de aguantar todo lo que pueda porque no le queda otra. “Está atornillado al poder porque necesita todos los resortes del poder para defenderse, y por eso pone a la Abogacía del Estado, a la Fiscalía y a los medios públicos a su servicio”, apunta
- En referencia a Félix Bolaños asevera que “en cualquier democracia moderna tendría que haber dimitido ya hace mucho tiempo. Le hemos visto en tribuna parlamentaria criticar a jueces con nombres y apellidos, y es el ministro de Justicia, el primero que debería respetar la separación de poderes”, concluye
