A juicio del PP, este tipo de programas que basan su contenido en el insulto, la descalificación y el improperio solo colaboran en sembrar distancia y aversión entre ciudadanos. Además, su contenido parece responder a una serie de directrices políticas de la dirección del programa o de la propia cadena pública vasca más que a su interés televisivo.
Una televisión pública que cuesta millones de euros de presupuesto público debe responder al interés general y alejarse del contenido que solo genera división y enfrentamiento. Por este motivo, el Partido Popular del País Vasco ha exigido la dimisión de la directora general de la cadena EiTB, Maite Iturbe, y ha solicitado al Lehendakari Urkullu la petición de disculpas públicas.
Todas las sociedades son más plurales de los que algunos quieren mostrarnos. Y en el caso de la sociedad vasca, lo que la televisión pública debería procurar es una convivencia libre y pacífica de todos los ciudadanos vascos.
