España vuelve a ser un país en el que se puede confiar porque cumple sus compromisos: reduce su déficit estructural 3,5 puntos.
El Presidente anuncia que el déficit se situó en el 6,7% del PIB y Bruselas confirma que el déficit cerró en 2012 por debajo del 7%.
Es el resultado del cambio de rumbo económico que ha liderado el Gobierno y del enorme esfuerzo que han realizado ciudadanos y administraciones.
La ayuda a la banca incrementa de forma puntual el déficit de 2012, pero ese déficit no consolida.
– Si el PSOE hubiera puesto en marcha la reforma financiera hace tres años, no hubiera sido necesaria abordarla en el peor momento de la crisis.
– Bruselas no tiene en cuenta el aumento puntual del déficit que ocasiona la reestructuración bancaria a la hora de abrir un procedimiento de déficit excesivo.
– El descenso puntual del PIB, que se esperaba por efecto de la reestructuración bancaria, mejora las expectativas inciales del Gobierno.
– El préstamo recibido por los bancos, lo devolverán los bancos.
España recupera la credibilidad tras años de incumplimientos con el Gobierno socialista.
2008: el gobierno socialista previó superavit pero tuvo un déficit del 4%.
2009: previó un déficit del 2% pero superó el 11%.
2010: el 9% de déficit volvió a superar las previsiones el gobierno.
2011: el PSOE aseguró un déficit del 6% cuando en realidad fue de casi el 9%.
Gracias al esfuerzo de ciudadanos y administraciones, España no se verá obligada a hacer ajustes adicionales.