Una vez conocido el auto por el que la Audiencia Nacional reconoce que hay delito y ordena seguir la investigación del caso, Cayetana Álvarez de Toledo cree que Rubalcaba tiene que hacer tres cosas:
• “Colaborar con la Justicia y contar toda la verdad de su responsabilidad y la de Antonio Camacho en el chivatazo a ETA”.
• “Pedir perdón a todos los policías y guardias civiles, y al conjunto de las víctimas del terrorismo, porque bajo su mandato al frente del Ministerio del Interior se cometió el delito más infame que se puede imaginar: ayudar a ETA a eludir la acción de la Justicia”.
• “Reconocer el fracaso de sus maniobras para dar carpetazo al caso y enterrarlo en el juzgado de Irún”.
“Rubalcaba no debería fardar tanto de su política antiterrorista. Cuando Rubalcaba llegó al Gobierno, ETA estaba políticamente liquidada y policialmente desahuciada. Por culpa de sus negociaciones y maniobras secretas, hoy ETA vuelve a tener bombas y votos”, ha concluido.
