Sáenz de Santamaría anuncia una Estrategia de Austeridad para "construir una Administración al servicio del ciudadano"

"No puede crecer una economía en la que el crédito está estancado y el ahorro no se traduce en inversión productiva"

La portavoz del Grupo Popular, Soraya Sáenz de Santamaría
La portavoz del Grupo Popular, Soraya Sáenz de Santamaría

La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, anunció hoy una Estrategia de Austeridad con una "profunda reforma" del conjunto de las administraciones a fin de "construir una Administración al servicio del ciudadano, y no a costa del mismo".

En su intervención en el almuerzo-coloquio del Club Siglo XXI, la dirigente popular recalcó que la austeridad "tiene que ser una obligación y no una opción", una idea a la que responde la Proposición no de Ley registrada por el Grupo Popular, a través de la cual se plantea que se fijen por ley los límites de gasto compartidos.

De igual manera, la iniciativa contempla la puesta en marcha de un Programa de Nacionalización Administrativa que baje el número de organismos públicos, el personal directivo y eventual, así como los gastos corrientes y de funcionamiento y propone también un Programa de Eficiencia de simplificación normativa para que se reduzcan los costes en términos de tiempo y complejidad.

Como señaló la dirigente popular en la conferencia que pronunció bajo el título Proyecto Político para la Confianza, "el mayor problema que pesa en el horizonte de nuestro país es la falta de confianza" y en un escenario como el actual, en el que el 20% de los españoles no puede trabajar y donde la crisis económica "es más larga, profunda e injusta" que en el resto de países, el objetivo debe ser la creación de empleo.

Objetivo éste al que responde precisamente el "proyecto reformista" del Partido Popular: "gobernar para crear empleo". Y para hacer eso posible, manifestó, "no podemos dedicar un solo euro a otro fin", por lo que la austeridad pasa a ser uno de los grandes ejes de un proyecto que entiende la política fiscal "como un instrumento clave para impulsar la generación de riqueza" que debe centrar sus esfuerzos en ayudar a quienes generan empleo, es decir, a PYMES y autónomos que son, subrayó, "el motor de nuestra economía".

Y los emprendedores, explicó, "no pueden funcionar sin el combustible que significa el crédito". "Una economía en la que el crédito está estancando y el ahorro no se traduce en inversión productiva no puede crecer", añadió, por lo que es necesario "facilitar el acceso al crédito de PYMES y autónomos".

Para facilitar el acceso al crédito, señaló, es necesario "evitar, en primer lugar, que la deuda pública siga absorbiendo los recursos que deberían llegar a particulares y empresas y, en segundo lugar, activar una reforma eficiente del sistema financiero que apueste por la transparencia, el saneamiento real y la profesionalización de las entidades financieras".

Además de dedicar la mayor parte posible de recursos a la creación de empleo es igualmente necesario "disponer de las mejores herramientas posibles para la contratación" con medidas para "agilizar y modernizar el marco de las relaciones laborales" que nos hagan "más eficientes pero también más competitivos", algo a lo que no responde la reforma laboral "del despido" del Gobierno hecha "sin consenso y cuyo balance de resultados son medio millón de empleos reducidos, algo que ya dijimos".

Y para lograr una economía competitiva es necesario avanzar hacia un modelo energético con un plan "a medio y largo plazo" diferente al modelo actual que, como definió, es "caro, ineficaz y excesivamente dependiente del petróleo" y que potencie, además, activos estratégicos como el turismo y el desarrollo de una estructura de industrias creativas que fomente la creatividad del conocimiento "abordando de una vez por todas la mejora de nuestro sistema educativo".

Todas las reformas encuadradas en el "proyecto reformista" del PP, que desglosó Sáenz de Santamaría, no sería posible llevarlas a cabo "al margen de las instituciones que tienen que protagonizar este proceso de regeneración" para lo cual, señaló, es necesaria una "regeneración institucional que implique de forma coordinada a todos los ámbitos territoriales y abarque a los poderes legislativo, ejecutivo y judicial" devolviendo así a la política "a su vocación de servicio público".

Para finalizar, la dirigente popular hizo un repaso a la situación internacional donde la revolución que viven los países árabes viene a suponer "en tiempo real", enfatizó, "la transformación de una parte significativa de nuestro horizonte estratégico que suma incertidumbres a un panorama económico aún sin despejar", después de una crisis financiera internacional "que ha supuesto una verdadera fractura económica".