El PP pide al Gobierno que revise y actualice la normativa sismorresistente para la construcción de edificios en España

García Ballestero pide también actuaciones de rehabilitación de los edificios situados en las zonas de mayor riesgo sísmico que hayan sido construidos hace más de 40 años

El portavoz de Vivienda del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, José Manuel García Ballestero, ha pedido al Gobierno, hoy, a través de una moción, que ha sido aprobada en la Cámara Alta que, "con carácter de urgencia, y con la colaboración de las Comunidades Autónomas y las Entidades Locales situadas en las zonas de mayor riesgo sísmico, se revise y, en su caso, actualice la normativa sismorresistente en España para la construcción de edificios".

Del mismo modo, la moción solicita al Gobierno que incentive, de manera coordinada con todas las Administraciones competentes actuaciones de rehabilitación de todos aquellos edificios situados en las zonas de mayor riesgo sísmico, que hayan sido construidos hace más de 40 años y de las infraestructuras críticas.

Por último, la iniciativa de los populares aprobada insta al Ejecutivo a reforzar la formación para el personal técnico y promocionar, en colaboración con las CC.AA. y las Entidades Locales, campañas de concienciación a la población que reside en zonas de mayor riesgo sísmico, difundiendo guías metodológicas de prevención en riesgos naturales, y elaborar manuales para centros de enseñanza primaria y secundaria al objeto de mejorar la información correctamente de cómo actuar en caso de terremoto.

Tragedia de Lorca

A lo largo de su intervención, José Manuel García Ballestero ha recordado el triste terremoto de magnitud 5,2 en la escala de Richter, que sacudió la localidad murciana de Lorca, causando nueve muertes, centenares de heridos e innumerables daños en los inmuebles de la ciudad y en su patrimonio histórico.

"El 90 por ciento de los edificios han quedado afectados por el temblor y ha provocado el colapso de algunos de ellos, obligando a miles de personas a dejar sus hogares" ha remarcado el parlamentario del PP por Cáceres.

Los expertos se han sorprendido de las consecuencias del seísmo ya que, aunque no fue el de mayor magnitud registrado en España (ha habido terremotos de hasta 7 grados sin víctimas mortales), sí que ha sido uno de los más destructivos.

Según ha expuesto García Ballestero, la explicación a tanta destrucción sería que el seísmo se produjo a muy poca profundidad, justo debajo del casco urbano y el tipo de suelo de arenas y grava donde está asentado Lorca ha amplificado la intensidad del movimiento.

"Es evidente que los cálculos constructivos antisísmicos en el municipio de Lorca han quedado superados, según la norma sismorresistente (del año 2002) ya que la aceleración sísmica del suelo fue el triple de la prevista para Lorca, derribando, incluso, edificios de reciente construcción", ha puesto de manifiesto el senador del PP.

Además, hay que recordar que siete de los nueve fallecidos murieron como consecuencia de la caída de cornisas, tejados y partes de las fachadas. Esto hace pensar que se debería extremar el cuidado en este tipo de elementos arquitectónicos.

Revisión de la normativa

Este suceso hace indispensable que, con carácter de urgencia, se revise y actualice la normativa de construcción de edificios, así como los protocolos de seguridad, al objeto de subsanar cualquier carencia que pueda existir y que se haya puesto de manifiesto tras el terremoto de Lorca. "Los expertos dicen que hay que actualizar el mapa de peligrosidad sísmica de nuestro país, del mismo modo que hay que revisar la normativa sismorresistente para adaptarla a la realidad actual", ha apostillado el parlamentario del PP.

Además hay que tener en cuenta que sigue habiendo en estas zonas de riesgo sísmico numerosos inmuebles que se han construido con anterioridad a los años 70 y no cumplen las normas de construcción sismorresistentes.

Por último, saber cómo actuar en caso de producirse un terremoto es fundamental para evitar pérdidas humanas. Por esto se hace indispensable poner en marcha cursos de sensibilización y de formación para el personal técnico de las localidades ubicadas en las zonas de riesgo sísmico, así como de los ciudadanos, y la elaboración de manuales para centros de enseñanza primaria y secundaria.