"El conocido como invierno demográfico es un desafío que debe ser considerado como un problema de Estado".
El portavoz adjunto en la Comisión de Empleo y Seguridad Social del Grupo Popular, Ildefonso Pastor, instó hoy al Ejecutivo, mediante una Proposición no de Ley, a que, "en colaboración con todas las Administraciones implicadas, elabore y desarrolle una estrategia global y transversal por el cambio demográfico, que diseñe una respuesta conjunta de futuro para paliar la problemática del progresivo envejecimiento poblacional y del despoblamiento territorial en España".
Durante el debate de esta iniciativa parlamentaria en el Pleno del Congreso, el diputado popular recordó que "el Instituto Nacional de Estadística (INE) certificó que en 2012 se experimentó, por primera vez, una disminución en el número de residentes en España y que Eurostat puso de manifiesto que fuimos el país de la Unión Europea que más intensamente experimentó este fenómeno".
Además, señaló que "en su última proyección para el periodo 2013-2023, el INE pone de manifiesto que de mantenerse las tendencias actuales España perderá más de 2 millones y medio de habitantes en los próximos diez años y que a partir de 2017 las defunciones superará por primera vez al de nacimientos".
Asimismo, subrayó que "hay algunas Comunidades como Castilla y León, Galicia, Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha y Extremadura cuyas dinámicas demográficas están marcadas por un crecimiento natural negativo, un saldo migratorio positivo y un acusado proceso de envejecimiento".
Según indicó el portavoz popular, "estas CCAA ya han celebrado tres reuniones y han firmado dos declaraciones institucionales en las que demandan la articulación de una estrategia conjunta que dote de respuestas específicas al problema demográfico", ya que, en su opinión, "se trata de un problema de Estado cuya magnitud desborda los límites administrativos".
Por todo ello, Ildefonso Pastor consideró que "la puesta en marcha de esta estrategia nacional es necesaria porque el conocido como invierno demográfico pone en jaque tanto la sostenibilidad de nuestro Estado del Bienestar como nuestra prosperidad futura".
En este sentido, añadió que "el envejecimiento y la despoblación de los territorios conlleva un aumento en el coste de financiación de los servicios básicos y un efecto depresivo estructural del consumo, la inversión y el dinamismo económico de la sociedad".
Por último, el diputado del PP subrayó que "la crisis demográfica en España supone un desafío que debe ser tratado, en nuestra opinión, como un problema de Estado".