Buruaga pide a Revilla que reaccione y dé un golpe de timón ante las señales de alarma sobre el declive de Cantabria

La presidenta del PP advierte de que la desaceleración es más profunda de lo esperado y se avecinan malos tiempos para Cantabria

La presidenta del PP de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga
La presidenta del PP de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga

La presidenta del PP, María José Sáenz de Buruaga, ha exigido hoy a Miguel Ángel Revilla que reaccione frente a las señales de alarma sobre el declive de Cantabria y dé un golpe de timón antes de que la situación sea irreversible porque, de lo contrario, pintan bastos para esta comunidad autónoma.   

Buruaga ha comparecido hoy en rueda de prensa para pedir al Gobierno de Cantabria que despierte, abandone el escapismo y la autocomplacencia en la que está instalado y haga frente a la preocupante situación económica que atraviesa la comunidad autónoma.

La dirigente popular ha advertido de que las señales de alarma indican que la desaceleración económica es más profunda de lo esperado y auguran malos tiempos para Cantabria, una comunidad donde no pasa un solo día sin que se conozca un indicador negativo sobre la mala evolución de todos los sectores productivos, porque todos están en zona de peligro.

Ante esta situación, la respuesta de socialistas y regionalistas es, según Buruaga, siempre la misma: restar importancia a las señales de alarma, echar la culpa a los demás e inventarse un nuevo proyecto para pedir prórroga e intentar distraer a los cántabros unos años más. 

“Viven en una realidad paralela y mientras, todos los problemas sin resolver y agravándose, porque nuestro Gobierno va siempre a remolque”, ha afirmado la dirigente popular y ha añadido que el Ejecutivo regional es incapaz de anticiparse a los problemas y de reaccionar cuando le estallan en la cara, porque entonces o ya es tarde o está noqueado.

Como ejemplo, ha citado la pérdida de la línea de ferri con Cork, un mazazo para Cantabria y la mejor noticia económica del año para el País Vasco.

La presidenta del PP ha hecho hincapié en que la factura económica de la coalición socialista regionalista no es pequeña ni admite maquillaje, porque Cantabria languidece, la economía regional está ya en el pelotón de cola del crecimiento y es líder en crear paro.

Y ha avisado de que lo que está ocurriendo en Cantabria era previsible y el PP no ha dejado de advertirlo.

Así, ha recordado que el Partido Popular lleva muchos meses advirtiendo de que Cantabria no puede vivir de la inercia ni del aire, que necesita un Gobierno con un proyecto de región que ejerza la autonomía y que tome decisiones porque el efecto tractor de las políticas del Gobierno del Partido Popular se iba a acabar y se acabó.

Para la presidenta, la situación de Cantabria es también consecuencia de la improvisación, los drásticos recortes en inversión pública, la falta de estímulo a hogares y empresas y la incapacidad para sacar adelante cualquier proyecto, que han provocado un enfriamiento rapidísimo de la economía que se ha traducido en paro.

Buruaga ha advertido de que el empleo no podrá ir bien si no se estimula el tejido productivo y la actividad empresarial, si no hay una política de inversión pública y privada y políticas sectoriales más eficaces y sin una auténtica política industrial, porque la industria, ha añadido, está pagando también las consecuencias de la demagogia del Gobierno regional.

La dirigente popular ha recordado que por primera vez desde el año 2014, en enero de este año hay más paro industrial que un año antes, a lo que se suma la reducción del Índice de Producción Industrial que indica que la región está en pleno retroceso productivo y la situación de las grandes industrias, que se tambalean porque sus cuentas no salen.

“No hay nadie que gobierne la industria en Cantabria”, ha afirmado Buruaga, quien tras recordar que no se ha puesto en marcha ni los parques eólicos, ni la minería de zinc, ni La Pasiega, ni las Excavadas, ha subrayado que al Gobierno de coalición PRC-PSOE se le mueren los proyectos industriales al mismo ritmo que inventa el siguiente.

A este panorama, ha sumado la incertidumbre que rodea las inversiones en infraestructuras pendientes en Cantabria, porque si cuando Revilla y Sánchez eran uña y carne no logró nada, ahora con las limitaciones de gasto público y las hipotecas que el Gobierno tiene que pagar a sus socios independentistas menos.

“Me gustaría equivocarme, pero pintan bastos para Cantabria si el Gobierno no reacciona y da un golpe de timón antes de que el declive sea irreversible”, ha afirmado la presidenta, quien ha reclamado un giro total hacia las políticas productivas y la inversión pública y privada y una rectificación en toda regla.

Y es que, para Buruaga, el Gobierno está haciendo todo lo contrario de lo que hay que hacer en estas circunstancias:  engordar el gasto improductivo, el déficit público y la deuda; negarse a bajar impuestos manteniendo una de las presiones fiscales más altas del país y aniquilar la inversión pública, que siempre es lo primero que se recorta. “Está cebando otra crisis con la agravante de que todavía no nos hemos recuperado de la anterior”, ha apostillado.

La presidenta ha asegurado que el Partido Popular no se va a quedar cruzado de brazos y ha anunciado que van a presentar un batería de iniciativas en el Parlamento y en las Cortes Generales para hacer reaccionar a la coalición PRC-PSOE y defender y tratar de trasladar a la acción de Gobierno su programa de estabilidad y crecimiento.