Rosa Romero: “El empleo es la mejor manera de proteger las pensiones”

Hoy, durante las comparecencias en el Grupo de Trabajo de Políticas Sociales de la Comisión para la Reconstrucción

La portavoz del GPP en el Grupo de Trabajo de Políticas Sociales, Rosa Romero
La portavoz del GPP en el Grupo de Trabajo de Políticas Sociales, Rosa Romero

• La portavoz del GPP en el Grupo de Trabajo de Políticas Sociales señala que una de las grandes prioridades en la salida de la crisis es proteger las pensiones y garantizar su futuro: “Nuestros mayores han sido los grandes damnificados por la pandemia, no podemos permitir que para salir de la crisis pudieran ser también perjudicados”

• Recuerda que el PP protegió a los pensionistas durante la crisis de 2011, tras heredar de un Gobierno socialista “el mayor recorte social” en pensiones de la democracia: su congelación. “El Gobierno del PP incrementó un 1,6% las pensiones de media, un 3% las mínimas y hasta un 5% las de viudedad”, recalca

• Advierte de que “el peor enemigo” de las pensiones es la destrucción de empleo -“en torno a 2,2 trabajadores pagan una pensión”, precisa- y alerta contra la acumulación de “datos negativos”: la pérdida de un millón de afiliados, la previsión del Banco de España de un desempleo del 20%, los dos créditos a la Seguridad Social por 30.500 millones para el pago de prestaciones por la pandemia, el cierre de la planta de Nissan en Barcelona, el despido colectivo en la factoría de Alcoa en Lugo, la pérdida de turistas y la baja tasa de natalidad

• Alerta contra el peligro de ruptura de la caja única tras el traspaso al País Vasco y Navarra de la competencia sobre el Ingreso Mínimo Vital • Señala que la reforma laboral aprobada por el Gobierno del PP en 2012 ha hecho posible que cuatro millones de trabajadores estén protegidos con los ERTE’s

• Denuncia “el abandono” al que el Gobierno ha sometido a la mujer, “la gran olvidada de la crisis”, al no haber puesto en marcha una sola medida efectiva de protección para sanitarias, trabajadoras en residencias de mayores, trabajadoras esenciales, empleadas de hogar, ni tampoco sobre teletrabajo, “por no hablar de las mujeres encerradas en sus domicilios con sus maltratadores y de las víctimas de la trata”

Hoy, durante las comparecencias en el Grupo de Trabajo de Políticas Sociales de la Comisión para la Reconstrucción