El PP defiende la tauromaquia como una fiesta de valores universales e inseparable de la identidad popular

El presidente de la Comisión de Cultura del Congreso, Juan Manuel Albendea, quiere que las corridas de toros "recuperen el esplendor de la edad de oro del toreo"

Albendea ha defendido la tauromaquia como una fiesta de valores universales y que es "inseparable" de las identidades que ha forjado y mostró su deseo de que "vuelva a recuperar el esplendor de la edad de oro del toreo".

En su intervención en el Pleno del Congreso con ocasión del debate de la Proposición de Ley para la regulación de la fiesta de los toros como Bien de Interés Cultural, el dirigente popular señaló que "como toda creación la fiesta expresa valores universales, que como toda cultura popular es inseparable de la identidad de los pueblos que la han inventado o adoptado y que lo que la diferencia de una simple manifestación folclórica es que ha sido adoptada y convertida en objeto de reflexión de la llamada cultura culta".

Es en este sentido en el que la supresión de los espectáculos taurinos supone, en opinión de Albendea, "un grave atentado a la cultura y la lengua", puesto que "la universalidad de la fiesta de los toros no son solo los valores que transmite sino también la de los mundos artísticos y cultos donde ha sido acogida y la de las obras que ha producido en las demás artes".

Albendea inició su intervención agradeciendo a los autores de esta iniciativa legislativa popular el trabajo desarrollado y que ha hecho posible que "hoy se celebre aquí un profundo debate con opiniones absolutamente contrarias y otras absolutamente a favor de convertir la tauromaquia en un bien de interés cultural".

En concreto, Albendea declaró que las tres enmiendas de totalidad presentadas por Izquierda Plural, ERC y Compromís constituyen "claramente un ataque a la ecología, la economía, la cultura, la lengua, la tradición y la libertad". Y lo argumentó: "Si se suprimen las corridas la dehesa desaparece y con él ese maravilloso ejemplar que es el toro bravo". "¿Acaso la mejor forma de proteger a un animal es contribuir a su desaparición?", se preguntó Albendea, señalando que sólo el 6% de los 200.000 animales de las ganaderías de lidia muere en el ruedo.

También esgrimió un estudio que ha llevado 5 años de investigación para analizar la respuesta hormonal de 180 toros y 180 novillos y cuya conclusión es que "la respuesta hormonal de las reses bravas es distinta de la de cualquier otro animal", como el hecho de que "los niveles de estrés son 3 veces mayores durante el traslado del animal que en el ruedo".

Albendea también destacó el impacto que la tauromaquia tiene en la economía, cifrándolo en 2.500 millones al año, y que genera un volumen mayor que el cine -un tercio más-, o el teatro -la quinta parte-. "A los espectáculos taurinos acuden en España 40 millones de personas al año y 60 en todo el mundo, y si sólo se contabilizan los festejos mayores hablamos de 9 millones de personas", explicó, a la vez que negó que las ganaderías de lidia estén subvencionadas con fondos comunitarios o que se vayan a conceder ayudas específicas para este fin en la reforma de la PAC.

Albendea también habló de que si se suprimen las corridas de toros "se perderían muchos términos del lenguaje diario" y que su desaparición supondría un "atentado contra la tradición", en el sentido de que "es una costumbre o espectáculo tan arraigado que tratar de prohibirlo es un ataque a una tradición multisecular en España y empobrecería nuestra cultura popular".

También supone un "ataque contra la libertad", "pues la fiesta no es de derecha o de izquierdas", y reiteró nuevamente la oferta de mano tendida de su formación para "negociar, hablar y hacer transacciones con el objeto de que salga adelante", pese a la "indefinición" manifiesta del PSOE en este y en otros muchos temas.