El GPP propone al Gobierno las medidas que garantizan mano de obra para recoger la cosecha

Con una Proposición no de Ley en el Congreso

Proponemos al Gobierno las medidas que garantizan mano de obra para recoger la cosecha
Proponemos al Gobierno las medidas que garantizan mano de obra para recoger la cosecha

El Grupo Parlamentario Popular ha reclamado al Ejecutivo, con una Proposición no de Ley en el Congreso, que los desempleados puedan trabajar de temporeros desplazándose internamente entre comunidades sin limitaciones a la movilidad geográfica, pues urgen medidas para encontrar 200.000 temporeros a fin de no poner en riesgo la recogida de la cosecha.

Además, aparte de autorizar el Corredor verde nacional, el GPP pide escuchar las recomendaciones de la Comisión Europea para que también puedan venir temporeros de otros países europeos a través del Corredor verde internacional, en ambos casos con las garantías sanitarias pertinentes y los protocolos habitacionales y de desplazamientos que garanticen la seguridad durante todo el proceso.

Concretamente, el GPP propone al Gobierno cinco medidas para facilitar la empleabilidad de trabajadores durante las campañas agrícolas en el periodo de la crisis por COVID-19, recogidas tras escuchar a todos los sectores afectados. En primer lugar, “realizar las modificaciones oportunas para ajustar la oferta y la demanda de puestos de trabajo en actividades agroalimentarias habilitando el acceso de trabajadores en diferentes situaciones de desempleo y ampliando el ámbito geográfico de contratación, para que en torno a 200.000 personas puedan realizar los trabajos de recolección necesarios”, teniendo en cuenta los más de 4.000.000 de parados.

En segundo lugar, “aprobar los protocolos necesarios para facilitar la movilidad interna entre diferentes provincias del país, en lo que se ha venido en llamar corredor verde nacional, asegurando las garantías sanitarias de traslado y habitacionales durante el periodo de contrato”.

En caso de no cubrir esa demanda de puestos de trabajo, el Grupo Popular demanda en tercer lugar “autorizar, en línea con las recomendaciones de la Comisión Europea, el corredor verde internacional para que los temporeros puedan trasladarse desde otros países europeos, con los controles sanitarios pertinentes y los protocolos habitacionales y de desplazamientos que garanticen la seguridad en todo el proceso”.

En cuarto lugar, “flexibilizar e implementar medidas que permitan, con los debidos controles sanitarios, la movilidad y los desplazamientos de los trabajadores a las
explotaciones o instalaciones de manipulado, aprovechando, por ejemplo, el transporte colectivo de colegios o turismo hoy infrautilizado y con problemas de viabilidad”.

En último lugar, reclama al Ejecutivo “ampliar las posibilidades de aplicar las medidas hasta que finalicen las campañas de todos los productos de este año”.

Como recuerda el GPP en su iniciativa, firmada por su portavoz, Cayetana Álvarez de Toledo, la portavoz adjunta Marta González, y la portavoz de Agricultura del GPP,
Milagros Marcos Ortega, algunos sectores agroalimentarios avisaron hace semanas, con inquietud y preocupación, sobre la escasez de trabajadores para manipular o recolectar sus productos y la cercanía de las campañas de recolección.

Mientras los ERTE se acumulan y afectan a 3,9 millones de trabajadores -un 16% de la población activa-, y ha proliferado el teletrabajo para no salir de casa, subraya la iniciativa, otros sectores deberían estar activos para garantizar nuestras necesidades básicas, como la actividad en el campo para el suministro de alimentos, y reclaman mano de obra para manipular o recolectar sus productos.

En la exposición de motivos, se señala que fuentes oficiales estimaron que en España se necesitarían entre 100.000 y 150.000 trabajadores para las actividades de campaña agrícolas, pero algunas organizaciones elevan la cifra hasta 200.000 trabajadores.

En esta situación se encuentran, cita la iniciativa del GPP, los empresarios de la fruta de hueso que en Aragón o Cataluña tiene que recoger las nectarinas y melocotones, los de la fresa en Huelva, la cereza del Valle del Jerte, las hortícolas en Alicante, en Murcia o Almería, el ajo en Granada, Córdoba, Cuenca o Albacete, el espárrago en Navarra o Guadalajara, las cebollas y patatas de Andalucía, Castilla o Valencia, y en el futuro las uvas en la mayoría de las regiones, pero especialmente en La Rioja, La Mancha, Galicia o Castilla y León.

El GPP alerta de que si no se hace nada al respecto, corremos el riesgo de no garantizar el abastecimiento de algunos productos, que estos adquieran un precio elevado o que se importen de terceros países, como ya se empieza a denunciar, lo cual produciría un impacto devastador sobre nuestro sector agrícola.