Casado: “En materia de inmigración no cabe la demagogia: hay que ser responsables, no populistas”

El presidente nacional del Partido Popular, Pablo Casado, ha afirmado hoy que “en materia de inmigración no cabe la demagogia, la izquierda no tiene el monopolio de los buenos sentimientos, a nosotros también nos desgarra ver estas imágenes, pero creo que tenemos que ser responsables y no populistas”. En este sentido ha aclarado que “no es posible que haya papeles para todos, no es posible que España pueda absorber millones de africanos que quieren venir a Europa y, como no es posible, tenemos que empezar a decirlo aunque sea políticamente incorrecto”. “Vamos a ser muy sinceros y muy responsables con esta cuestión, que a la gente le está preocupando, y es compatible hacerlo con seguridad pero, al mismo tiempo, con la solidaridad de la que siempre España ha hecho gala”, ha recalcado.

En declaraciones a los medios de comunicación, junto a la estatua del expresidente Adolfo Suárez y en un acto posterior en la Casa del Presidente en Ávila, el dirigente popular ha defendido que el Partido Popular “no va a consentir ataques a policías y va a defender “la cooperación en materia de seguridad y el apoyo sin complejos y sin fisuras a la Policía y a la Guardia Civil”. Además, ha destacado que, tras anunciar ayer que va a visitar el miércoles Algeciras y Ceuta para preocuparse por la llegada masiva de migrantes, “apenas dos horas después el Gobierno anunció que iba a visitar estas localidades”. “Eso quiere decir que el PP está liderando no solo la oposición, sino la alternativa e iniciativa en España”, ha recalcado.

En cuanto a la lucha contra las mafias, Pablo Casado ha insistido en que hay que apoyar a nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y “darles las gracias porque están defendiendo nuestras fronteras, nuestros derechos y libertades”. En segundo lugar, ha expuesto que es necesaria la cooperación internacional entre el Frontex y las autoridades europeas de todos los países frente a este problema global, “tenemos que proteger nuestras fronteras como país, pero también como frontera sur de Europa”.

En tercer lugar, Casado ha subrayado la necesidad de la cooperación y la solidaridad en origen, mediante planes para la formación y la empleabilidad, para “que esa pobre gente no se vea abocada a echarse a una muerte segura al mar, sino que pueda tener ayuda para conquistar un futuro mejor”. “De nada sirve decir que se van a retirar las concertinas o que se va a hacer una política de papeles para todos”, ha advertido.

 LO QUE HABÍA BAJO LA MESA

En su intervención, el presidente del Partido Popular también ha hablado de las amenazas que hizo ayer Puigdemont a Sánchez, diciéndole que se le había acabado el periodo de gracia. “Nos preocupa porque quiere decir que hay algo bajo la mesa que no conocemos, que hay alguna negociación a la que se había pedido un periodo de gracia pero que ahora hay que cumplir”, al tiempo que ha recordado que el PP ya dijo “legítimamente que eso no iba a ir bien, que no se podía construir sobre la destrucción” y que el tiempo les está dando la razón. “Pero lo peor no es lo que estaba encima de la mesa, lo peor es lo que empezamos a ver que había debajo y son cuestiones que no podemos aceptar, no sólo como partido, sino como sociedad”, ha añadido.

Casado ha dicho que por parte del PP “el periodo de gracia también se ha acabado”. “Este Gobierno lleva ya casi dos meses, está demostrando que no tiene apoyos para gobernar y lo único que quiere hacer es tumbar todas las buenas reformas que hizo el PP, reabrir conflictos históricos y morales entre los españoles, empezar a incumplir sus compromisos internacionales como el del techo de gasto y la senda de déficit, empezar a preocupar a todos los españoles con la política de papeles para todos en la inmigración, acabar con la concertada pactada con los independentistas, acercar presos etarras; en definitiva, un desastre en dos meses”.

“El PP ha vuelto para quedarse y el PP va a empezar a exigir porque ya le decíamos al PSOE lo que iba a pasar si esa moción prosperaba. No es que estén solo para tumbar todo lo que ha hecho el PP, es que empezamos a ver el coste que tenía ese pacto”, ha advertido. “Nos da igual cuándo convoquen elecciones porque las vamos a ganar, estamos dispuestos a salir a ganarlas ya”.

REIVINDICAR LA CONCORDIA

Junto a la figura del expresidente del Gobierno, Adolfo Suárez, una “figura fundamental de la reconciliación, de la concordia, de la Transición española”. Pablo Casado ha reivindicado que “somos herederos de una Transición ejemplar” y ha subrayado la necesidad de seguir ese relato de reconciliación y de concordia, “más aún cuando el Gobierno de Pedro Sánchez intenta volver a ahondar en las diferencias de lo que pasó hace muchas décadas en vez de mirar hacia el futuro”. “Abracemos la concordia, no es posible que tengamos un Gobierno en España que esté más pendiente de lo que pasó hace 40 años”, ha lamentado.

“No podemos permitir que vuelva a haber rupturas en la convivencia, tenemos que estar pendientes de lo que tiene que pasar en España dentro de 40 años y no de lo que pasó hace 40 años; tenemos que saber todo lo bueno que tenemos que hacer dentro de 80 años y no todo lo malo que pasó, hace 80 años, y, sobre todo, no hay que hablar de memoria histórica sino de memoria viva, de memoria vivida como la que vivió Adolfo Suárez, como la que vivió Santiago Carrillo, Felipe González o Manuel Fraga, entre otros muchos, que es la memoria viva de no repetir los errores del pasado, de abrazarse, en ese abrazo de la Transición, para poder ir todos juntos”.

Además, ha aclarado que “no hubo amnesia, sino amnistía política, no hubo un borrón y cuenta nueva, sino un recuerdo de los errores que no había que repetir”. “Que no se equivoque la gente, en este país no hubo una amnesia, en este país hubo una reconciliación y esa reconciliación está viva”, ha subrayado.

Por último, se ha preguntado qué derecho tienen los nietos de esa generación extraordinaria, de reabrir esas heridas. “Lideremos esa España sin ira, tranquila, en la que reivindiquemos nuestra mejor historia –ha concluido– Yo me quedo con eso, con lo positivo que mi generación tiene que reivindicar: la concordia, la Transición y la Constitución”.